Negocios

28 de enero de 2020

El proceso de innovación puede incluir varias etapas y no tienes que ser experto en todas. En este proceso puedes tomar ventaja de gente que ya pasó por ahí, y puedes encontrar gente que está dispuesta a compartir su expertise.

Los procesos de innovación implican cambio. La gente en general resiste el cambio. Y muchos de ustedes, que ya han tomado entrenamientos conmigo, saben que la resistencia proviene de alguna creencia que alguien puede tener, y que en el fondo resistes lo que resistes porque crees que debería ser de otro modo. Porque hay una creencia que fue aprendida de que las cosas funcionan de otra manera.

Muchas veces nos piden en los entrenamientos empresariales el manejo de la resistencia, y esto es porque quizás en los equipos de trabajo existe una creencia de que las cosas deberían manejarse de otra manera. El manejo de la resistencia implica, entre otras cosas, la empatía, el cuestionamiento de las creencias básicas, y una revisión tanto del clima organizacional como de la cultura organizacional. (Si no sabes la diferencia entre estos dos, mándame un mensaje y te explico…).

Manejar la resistencia significa, en esencia, revisar de dónde sale la resistencia, cuál es la creencia básica que genera esa resistencia, y cuestionar su origen. Generalmente se puede encontrar un punto en donde se demuestre que tú creencia no es una verdad absoluta y que existe la posibilidad de encontrar otra creencia que te pueda empoderar y ayudar a quitar esa resistencia. Manejar las creencias también implica revisar qué emociones y sentimientos están involucrados y permitir que estos sentimientos salgan sin empujarlos ni enjuiciarlos, y que puedan ser expresados de manera auténtica y honesta…. Aunque a veces duelan…

En conclusión, si sabes manejar la resistencia al cambio, sabrás llevar a buen puerto la innovación que propones. También recuerda que lo más importante es tomar acción… “pensar diferente no es hacer diferente”.